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Muchos padres dejan algún tipo de luz en el la habitación del bebé durante toda la noche.
Los bebés naturalmente no necesitan luz para dormir, ni para calmarse, ni sentirse seguros por la noche, salvo que lo hayan aprendido porque lo han visto anteriormente y estén acostumbrados.
Al nacer ellos no tiene miedo a la oscuridad, de hecho se acostumbran a la luz de la vida extrauterina, y no solo a esto, sino a todo lo que hacemos de forma rutinaria y repetida.
El ser humano, por naturaleza necesita de oscuridad para dormir. En la oscuridad de la noche el organismo segrega una hormona llamada MELATONINA que regula el estado de sueñovigilia, por eso es importante oscurecer la habitación del bebé y no dejarle objetos luminosos como lámparas, o dispositivos de luz en los enchufes.
A mayor cantidad de luz, menor cantidad de MELATONOINA, y esto puede perjudicar el sueño del pequeñín.
La luz durante la noche no es saludable, puede modificar el descanso, alterar el reloj biológico.
Podemos encontrar a los bebés y niños cansados durante el día, ya que el sueño no ha sido reparador, debido a la presencia de luminosidad, y que entonces el organismo haya secretado menor cantidad de MELATONINA.
Según nuevos estudios, la luz nocturna, puede afectar a la vista
Recomendaciones
- Si el bebé se despierta por las noches para alimentarse, no prender luz en la habitación
- Usar luz tenue del pasillo
- O del baño
- Nunca luz directa
- Alimentarlo sin distracciones, en silencio, de forma tranquila
Y cuando termine y haya eructado, acostarlo nuevamente.
¿Cómo duermen sus bebés?